Las canciones que no he parado de escuchar en noviembre

Las nuevas canciones de Papa Topo, Beirut, Perra Inmunda con Chico Blanco, Moses Sumney con ANOHNI, Squid y Omar Apollo son las culpables de que este mes de noviembre no haya parado de darle al «repeat».

Suelo decir que eso de tener las listas de lo mejor del año preparadas a principios de diciembre es algo totalmente absurdo porque, al fin y al cabo, siempre hay sorpresas que corren el riesgo de quedarse fuera de ellas por aparecer a última hora y cuando nadie las espera. Pongamos como ejemplo esta «Me Voy A Desenamorar De Ti» publicada hace escasos días y que, directamente, se ha convertido en una de mis favoritas de este 2024 por todo lo que tiene de puntal en la carrera de Papa Topo a la vez que de síntesis del refinamiento de ciertos gustos musicales que nos venimos gastando en los últimos tiempos.

Adrià Arbona ha pegado un buen golpe sobre la mesa para plantar esta composición que incluso brilla a nivel de colabo con la presencia de Juliana Gattas (de Miranda!). Lo primero que sorprende en «Me Voy A Desenamorar De Ti» es un envoltorio musical que derriba un poquito más los muros de contención de la revisión del folclore español por la vía de la tecno-copla con voluptuosos arabescos que hacen pensar, inicialmente, en el «Por España» que Arbona ya compuso junto a Samantha Hudson. Pero, sobre todo, hace pensar en maravillosas asociaciones imposibles como Carlos Berlanga produciendo a Camela o La Prohibida marcándose una trieja con Sonia y Selena. Por no hablar de detalles de producción loquísimos como la melodía de caja de música diabólica que suena por debajo de todo o los electro-latigazos rollo vogue ballroom que, tras la intro, transforman la canción en algo totalmente diferente.

Y después está la letra… ¡La letra! Pocos son los suicidas kamikazes que, en tiempos de reducción al mínimo común denominador del reggaeton (sin que esto sea algo malo per sé, que conste en acta), apuestan por la complejidad con la que se planteaban las emociones en las coplas de Rafael de León o los baladones de Manuel Alejandro, por poner tan solo dos ejemplos. Pero es que Papa Topo reviste el musicón de «Me Voy A Desenamorar De Ti» con los ropajes de una letra que podría haber sido escrita en 1924 pero que resuena muy pero que muy intensamente en pleno año 2024.

«Todo empezó en un mes de agosto a la vera de un torrente. Me agarraste y me besaste hasta adueñarte de mi mente. Y la luna, que acechaba, viéndome se santiguaba: Dios te ampare, Dios te salve de este cruel baño de sangre”, cantan Arbona y Gattas en el glorioso puente que establece las bases de esta pasión loca (como locas seguimos siendo todas las que queremos como las locas). Una pasión loca en la que«cuánto más te doy de mí, menos quieres. Y cuánto más quieres, menos te doy». Algo que seguro que ocurría en el siglo pasado… pero que adquiere un significado pletórico en la era de las relaciones tóxicas alumbradas al calor de Tinder, Grindr e Instagram.

Así que solo puedo decir: gracias, Papa Topo, por permitirme cantar sobre mi vida en pleno año 2024 con la pasión de las trágicas copleras del siglo pasado que dibujaron con sangre y lágrimas el renglón torcido sobre el que siempre he querido escribir mi propia biografía.

Zach Condon está en racha. El año pasado ya me reconquistó con esa joyita de disco titulado «Hadsel» (Pompeii, 2023) en el que exploró la melancolía infinita de un órgano de iglesia que descubrió en el norte de Noruega, donde pasó un invierno recuperándose de un colapso mental. En una isla remota, para ser más exactos. Aquel álbum ya se intuía como una reconexión de Beirut con unas emociones que mezclaban tristeza y melancolía, candidez y esperanza. Y esa es la mezcla que ha acabado por explotar en esta nueva canción titulada «Caspian Tiger».

Ojo, que no es prólogo de nuevo disco ni nada parecido. Es, simple y llanamente, parte de la banda sonora que Condon ha compuesto para la gira internacional con la que la compañía sueca de circo contemporáneo Kompani Giraff presenta su nuevo espectáculo«Study of Losses». Pero, más allá de eso, «Caspian Tiger» es la composición que (muy) inesperadamente pone a Beirut a la altura de Sufjan Stevens. No solo en esa música basada en piano y melódica que es tan frágil que parece que se va a romper en cualquier momento, sino sobre todo en una letra que recurre a animales de fantasía para hablar de temas muy pero que muy humanos.

«You’re awful shiny and I’m awful vague, You’re so together and I’m known to beg. For one moment won’t you lie with me, I’m in the rain. For one moment, it’s the last I swear, I feel your pain» («Eres horriblemente brillante y yo soy horriblemente vago. Tú lo llevas tan bien y yo soy conocido por mendigar. Por qué no te acuestas aquí conmigo por un momento, estoy bajo la lluvia. Por un momento, te prometo que es el último, siento tu dolor.») ¿A quién le habla este «Caspian Tiger» en una conversación polisémica que puede ser entendida como un diálogo con la eternidad o como una aproximación a alguien que amas y te hace sentir pequeñito o como te dé la gana a ti? Me da igual a quién le hable. Porque ahí está la belleza de esta nueva canción de Beirut.

Incontables son las veces en las que, como periodista pero también como personaja adicta al sanísimo deporte de perderse en lo más profundo de la noche, he recurrido al cliché de que el house me alucina cuando se convierte en lubricante para la experiencia de comunidad en la pista de baile. Cuando es el cemento que te hace sentir en sintonía con todos aquellos que te rodean y bailan y corean la música al mismo ritmo… Música con letras de house clásico a tope de LGTBIQ+ rollo «we are family» y «you will survive» y tal.

Y esto es verdad, claro, pero también es verdad que la noche de club puede ser caótica y sucia y messy… y, precisamente por todo lo anterior, jodidamente divertida. ¿Sabes esas veces que estás ciega en el club y tu amiga te dice algo y no os entendéis pero intentáis entenderos y al final acabáis meadas de la risa por el surrealismo del momento? Pues eso es lo que han plasmado Perra Inmunda y Chico Blanco en su nueva canción «Cómo Se Dice», que precisamente parte de uno de esos malentendidos lingüísticos pero añadiendo aquí la complicación habitual cuando un guiri intenta entrarte mientras tú estás pioja total y no sabes inglés. O, si lo sabes, no te acuerdas.

«Cómo Se Dice» incluso puede ser entendida como una canción narrativa: un maravilloso diálogo entre Perra Inmunda (artiste de Colombia que ya ha trabajado con nombres como DJ Gigola o KevKoko) y Chico Blanco (que por estos lares ya no necesita presentación) mientras suena el musicón del club de fondo y, por mucho que tú quieras parar para prestar atención al chisme, pues no puedes porque el musicón está demasiado bueno. Musicón que, por cierto, es tan solo el primer avance de un EP compartido entre los dos artistas. Ganas le tengo.

Lo reconozco: el disco póstumo de SOPHIE me dejó bastante frío por mucho que «Reason Why» me siga pareciendo uno de los grandes temazos de este año. Pero no pasa nada, porque esa bajuna ha sido contrarrestada en los últimos días por Moses Sumney y ANOHNI, que han unido fuerzas para versionar «Is It Cold In The Water?», la canción de SOPHIE que ya ponía los pelos de punta en «Oil of Every Pearl’s Un-Insides» y que en esta ocasión provoca escalofríos al resignificarse profundamente tras la muerte de la artista. Aquí y ahora, la pregunta «¿hace frío en el agua?» resuena con una fuerza realmente afligida y desesperanzada.

Pero, bueno, un pequeño apunte final: la canción formará parte de «TRAИƧA», el nuevo recopilatorio benéfico de Hot Red Organization destinado a recaudar dinero para la lucha contra el VIH. Será un recopilatorio de artistas versionando a otros artistas que no solo incluirá covers como la de «Get Me Away From Here, I’m Dying» según Julien Baker y Calvin Lauber, sino que incluso traerá un nuevo tema de Sade. Ya estoy preparando el corazoncito, porque sé que va a doler.

No es que el mundo vaya necesitando un heredero en la línea sucesoria de IDLES y Fontaines DC… Y lo mejor de todo es que, probablemente porque el mundo no necesita tal cosa (todavía), Squid llevan unos años dibujando su particular curva ascendente con un sonido mutante y líquido que puede partir del post-punk, pero que se desborda por encima de los límites de este género para desparramarse hacia lugares inesperados.

Tomemos como ejemplo esta «Crispy Skin» con la que Squid avanzan el que será su tercer disco, que se lanzará el próximo mes de febrero bajo el título de «Cowards» (Warp, 2025). Para empezar, la canción está inspirada en «Tender is the Flesh», una novela distópica sobre un mundo en el que el canibalismo es una práctica normal. Pero, sobre todo, en lo que respecta a lo musical, resulta que el tema es una coctelera en la que los mencionados en el párrafo de arriba se mezclan con los bajos oscuros de The Horrors, el experimentalismo fraccionado de Alt-j o el p-funk neoyorkino de Bodega. ¿El resultado? Seis minutazos que pasan como si fuera uno. Y que te dejan con ganas de más.

Esto es demasiado. En serio, es demasiado. Porque ya tenía el hype por las nubes con «Queer», la película en la que Luca Guadagnino adapta la mítica novela de William S. Burroughs. Pero es que al final resulta que la música del film vuelve a estar firmada por Trent Reznor y Atticus Ross, que ya se laurearon con la banda sonora de «Rivales». Y que, además, para celebrar que el estreno está a la vuelta de la esquina (¡el 3 de enero!), Guadagnino ha dirigido un videoclip en el que Omar Apollo canta la escalofriante balada «Te Maldigo» en un bar latino que captura a la perfección la mariconería poética del libro de Burroughs. Y ahora ya no sé… ¿Qué hay más arriba del hyper por las nubes?

Sinceramente,

Raül De Tena

Sobre el autor

Raül De Tena

Al ponerme a escribir esta bio me he dado cuenta de que, así, a lo tonto y como quien no quiere la cosa, llevo más de veinte años escribiendo sobre temas relacionados con la música, la moda, el cine, la literatura, la cultura en general. Siempre he escrito muy sinceramente... Pero, ahora, más todavía.

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Raül De Tena

Al ponerme a escribir esta bio me he dado cuenta de que, así, a lo tonto y como quien no quiere la cosa, llevo más de veinte años escribiendo sobre temas relacionados con la música, la moda, el cine, la literatura, la cultura en general. Siempre he escrito muy sinceramente... Pero, ahora, más todavía.

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